Quien hubiera imaginado que ese miercoles seria el ultimo? Que aquel canape trazado tan habilmente en su teta izquierda no era mas que la impronta que deja una etapa cuando caduca. El olfanato se cerraba ,era inevitable, cuestion de dias. La abuela "Corticoides" ( como la nombraban los traviesos niños) quedaba despojada de su vida entera.
Salio por fin del sucio toilet, tambien por ultima vez. Parado junto a la puerta del viejo comedor estaba Omar "Patata frizada" Newman, el jardinero del Olfanato.
-Mire lo que han escrito ayer por la tarde sus picaros angelitos!ajaa... los niños y sus travesuras! Hay abuela Corticoides!!, se que va a extrañar todo esto tanto como yo- dijo dulcemente el anciano señalando el rincon detras de la gran mesa. Sobre la pared una mano infantil habia pintado una leyenda. La abuela la leyo risueña. Decia : "VAN HELLSING PUTO"
Eran pintadas habituales en el orfanato vampiro, casi una expresión de nacionalismo, de orgullo por la raza, por ser como eran....y especialmente porque sus padres habían muerto bajo las manos de aquel, conocido por todos como, el puto. La abuela Corticoides era para muchos la única imagen materna, y paterna en algunos casos también; de ahí que se dejaba la barba.
Le acaricio suavemente los testículos, arrugados y ya medios caídos por la edad, al viejo Omar y siguió su camino. La noche terminaría más rápido de lo que se imaginaba, es más, sería la noche mas corta de su larga vida...de repente la puerta que tenia detrás se abrió...no era necesario darse vuelta, sabía que era el sargento kiko y sabia que en su mano, aferrada como un carpincho a un helado de sambayón y pistacho, estaba la misteriosa afeitadora asechándola en el aire denso y húmedo de abril....
Liberen a Michel Michelson!!
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